The Amazing Spider-Man 1-50: la presentación del personaje

Los inicios de Spider-Man suelen ser descritos como sorprendentes. En nuestra era se han elevado al rango de leyenda, convirtiéndose en todo un manual sobre lo que debes hacer para tener éxito en un comic.

Por aquella década de los 60’s donde los primeros 50 números de The Amazing Spider-Man moldearían al personaje y escribirán las reglas del canon arácnido, resaltan por entre todas las cosas, la tripleta conformada por Stan Lee, Steve Ditko y John Romita. Los primeros dos hicieron un trabajo excepcional, pero es la dupla Lee-Romita la más recordada y venerada.  

Los primeros 38 números de la serie pertenecen a un Ditko que le daba a un Peter Parker más problemas personales que heroicos, principalmente económicos. La inocencia del joven estudiante poco hábil para socializar, se entrelazan maravillosamente con la poca experiencia que un estudiante de estas características puede tener como superhéroe. El Peter Parker de Ditko es todo aprendizaje; aquel joven entusiasmado por las ciencias pero tan malo socialmente que se le encasilla con los términos “nerd” y “perdedor” en ilimitadas andanzas. Malo con las mujeres, pronto encuentra refugio en los brazos de Betty Brant, aquella secretaria de Jonah Jameson que siempre ve a Peter como la pareja ideal. Aquel hombre al cual por fin, podría poner riendas y ser la mandona de la relación. Claro, hasta donde la dulce y tierna Betty Brant puede llegar a ser.

La casi madre de Peter Parker, la tía May, es tan inocente que jamás llega a pensar que su sobrino, aquel que tiene que alimentarse adecuadamente para crecer, puede ser el hombre que sale a combatir el crimen vestido con un traje azul y rojo.

La parte social de Peter Parker se transforma rápidamente, pues de no tener ningún amigo pasa a ser parte de la pandilla comandada por Flash Thompson, Harry Osborn y Gwen Stacy, a la cual se le uniría rápidamente Mary Jane. Pronto Peter desarrolla una habilidad con las mujeres que permanecería hasta la actualidad. Les suele parecer atractivo. Madurar y dejar en claro que no ama a Betty Brant, es ayudado con el descubrimiento de Gwen Stacy, la joven que se roba sus suspiros. Para complicar más las cosas y reforzar la suerte que tiene Parker con las mujeres, llega Mary Jane Watson, la chica consentida de Romita. Esta pelirroja desinhibida contagia de energía a un cada vez más curtido y experimentado Peter Parker, quien para el numero 50, esta mas que afianzado en el Bugle al cual pensó cambiar e incorporarse a su competencia. Pero a quien quieres engañar Peter Parker, tú perteneces y siempre lo harás, al periódico liderado por Jonah Jameson.  

Los coqueteos entre Gwen y Peter son más que evidentes, pero la belleza y desfachatez de Mary Jane no puede dejarse de lado. En este punto de la historia, el lector empieza a inclinarse por una u otra, aun sin saber que a la postre, la rubia y la pelirroja terminarían siendo las mujeres más importantes en la vida de Peter Parker. Romita quien llega a partir del numero 39 tiene más finura y toque para relatarnos la vida de Peter y sus amigos. Se concentra en las diferentes personalidades de los integrantes de la pandilla, explorando como cada una de estas se complementa. Por supuesto que ahonda en la fracturada relación padre e hijo de los Osborn.

Como Spider-Man, Peter Parker  sufrió aun mas para afianzarse como el superhéroe numero uno de Nueva York. Bajo la crítica de Jonah Jameson, Spidey aun no logra ganarse la completa confianza de los ciudadanos Neoyorquinos. Una campaña anti-Spider-Man mostrada desde el primer número de la serie, lo terminará acompañando el resto de su vida.

Los primeros villanos del trepamuros empiezan a llegar de la mano de Steve Ditko. Personajes como Vulture, Doc Ock, Sandman, Camaleón, el Lagarto, Electro, los Forzadores, Mysterio, Duende Verde, Kraven, Scorpion, los Mata-Arañas y el Hombre Ígneo, pusieron en aprietos a Spider-Man, algunos de ellos propinándole derrotas dolorosas llenas de experiencia.  De las golpizas se aprende y el trepamuros terminaría por inventarse los gadgets que hoy en día conocemos de principio a fin.  Poco después de crearse los lanzaredes, Peter se da cuenta de lo poco duraderos que son los cartuchos arácnidos, por lo que se agrega un cinturón al traje. En esa misma historia la tía May le obsequia una pequeña cámara perteneciente al tío Ben. Ahora si está listo para sacarse fotos y ganar un centavo en pro de la vieja May. Un numero más tarde vemos la famosa lámpara adherida al cinturón. Una luz que no tiene función alguna, pero es un sello característico de aquellos años. Los rastreadores arácnidos llegan más tarde, inventados para seguir al Doc Ock tras su salida de la cárcel.

Las historias sencillas de “superhéroe contra maleante roba bancos” poco a poco se tornan más complicadas, definiendo a su vez a villanos icónicos como el Dr. Otcopus quien logra desenmascarar a Spider-Man. Un Duende Verde que tarda en revelar su identidad evoluciona su aspecto y sus tretas que hacen caer a Spider-Man una y otra vez. Otros como el Buitre y Kraven solo vuelven para tomar venganza, claro que sus planes son cada vez son más elaborados. Sandman es por primera vez derrotado siendo metido en una aspiradora y Rhino recibiendo telaraña especialmente creada para derretir su traje. El mundo de la mafia es mostrado pero aunque, Frederick Foswell nos lo introduzca atractivamente, se desarrollará más tarde y fuerte en un futuro.

Es en esta época donde descubrimos que el villano más temible para Spider-Man es un simple resfriado, quien logra debilitarlo como ningún otro. Por la mano de Romita llegan Shocker,  Rhino, una segunda etapa del Buitre, donde el dueño de las alas es Blackie Drago y la incorporación de Kingpin, uno de los más temibles, que combina fuerza, poder y cerebro. Aun no sabemos por quien se decidirá Peter, ¿será la rubia o la pelirroja? Eso sí, las dos se suben a su flamante motocicleta que cambio de color azul a rojo rápidamente. Descartada Betty Brant, quien decide comprometerse con Ned Less, el corazón de Peter empieza a ser no de Gwen ni de MJ, sino de Spider-Man, al cual ha rechazado ya, tirando su traje a la basura. No duro mucho sin él, descubriendo que son uno mismo. Aunque inevitablemente es en esta época, cuando más se plantea ser un héroe. ¿Por qué tiene que arriesgar el pellejo sin recibir nada a cambio? Porque un gran poder conlleva una gran responsabilidad Peter, por eso.

Por lo menos dos veces enfrento a sus rivales con el brazo roto y por primera vez le vimos en la nieve. Son en estos primeros 50 números donde vemos al Dr. Warren esporádicamente y descubrimos lo mucho que Peter odia coser su traje. La graduación y la ganancia de una beca  en Ciencias para la Universidad Empire Stateen por ser el promedio más alto en la historia de la escuela, son contrastantes con el anuncio de la incorporación de Flash al ejercito.  Una maduración que aleja a Peter del clásico traje azul con chaleco amarillo viene con el cambio de estafeta de Ditko a Romita.

Historias fantásticas que establecerían las reglas y conceptos que veríamos por los siguientes 50 años, o por lo menos hasta que cierto escritor disfrazado erróneamente en el concepto de  innovación, vino a querer reinventar el canon arácnido dándole el honor de vestir el traje a quien menos lo merecía.

Unos primeros cincuenta números de presentación y definición, a los cuales vendrían a reforzar, por lo menos, otros cien para completar la mejor etapa de Spider-Man en los comics.